15.11.13

Destino de Invierno: Praga





En esta ocasión os propongo Praga como destino europeo, esencial para mi sin duda alguna además de ser uno de los más increíbles para una viajera intrépida como yo.

Sobre Praga, decir que es una ciudad mágica, de puentes, catedrales, torres doradas y cúpulas de iglesias, reflejada en el caudaloso río Moldava desde hace más de diez siglos. Ciudad moderna y vibrante, llena de energía, música, arte y cultura, gastronomía y eventos.

El hecho de estar poco dañada por los efectos de la Segunda Guerra Mundial, hace que su centro medieval siga siendo una maravillosa mezcla de calles adoquinadas, patios amurallados, catedrales e iglesias.

Praga es la capital y mayor ciudad de la República Checa, desde 1992 el amplio centro histórico de Praga ha sido incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, haciendo de la ciudad uno de los destinos turísticos más populares en Europa, recibiendo más de 4,1 millones de visitantes internacionales al año, a partir de 2009.Por sus características, es considerada una ciudad global de clase gamma, a la altura de Ámsterdam o Washington y superando a grandes urbes como Roma, Estocolmo y Pekín.

Entre las experiencias que Praga nos ofrece os cito aquí las que más curiosas me han parecido:
  • Para los amantes de la cerveza recomiendo degustar la famosa cerveza checa en el casco antiguo debería ser casi una obligación. Os comento también como dato curioso que en el año 1842 nació la famosa Pilsner;original de la ciudad de Pilsen; para revolucionar el mundo de la cerveza. Deliciosa, ¡por cierto!


En la República Checa se elaboran algunas de las mejores cervezas del mundo y los checos están muy orgullosos de ello, por lo que es fácil encontrar un gran número de cervecerías, tabernas y bares que sirven la cerveza local, como U Fleku, la cervecería más antigua y conocida que data de 1499. Incluye un restaurante al aire libre en el que podemos degustar todas las antiguas variedades de cervezas, como la deliciosa cerveza negra Flek 13.

  • Como amante de la música no me puedo resistir a recomendaros escuchar a los músicos del Puente de Carlos IV, como en cualquier gran ciudad, abundan los músicos callejeros en busca de unas monedas de los viandantes, pero en este caso, los que actúan sobre el archiconocido Puente, hacen sentir realmente la música a todos aquellos que se paran a escucharlos.

  • Una de mis debilidades, las zonas verdes. De ahí, muy encarecidamente me tomo la osadía de animaros a hacer un picnic en el parque de Riegrovy Sady, un agradable parque muy popular entre los locales de Praga. Cuenta con largas praderas de césped en las que el turista puede disfrutar de un agradable picnic al estilo de los praguenses en días soleados. También cuenta con un gran "pub" al aire libre y una colina con hermosas vistas hacia el Castillo de Praga.
    Parque de Riegrovy Sady
  • La visita al Museo de Arte Contemporáneo de la isla de Kampa, resulta también bastante interesante. En esta encantadora isla, ubicada en un antiguo molino, encontramos el Museo de Arte Contemporáneo. Una sorprendente galería dedicada al arte del siglo XX centro-europeo Lo más destacado de la exposición permanente son las enormes esculturas de Otto Gutfreund y pinturas de Frantisek Kupka, el pionero del arte abstracto. Fuera del museo, encontraremos los famosos bebés gigantes de David Cerny y una gran fila de pingüinos sobre el río.
Bebés gigantes. David Cerny

  • El Teatro Negro de Praga es un teatro diferente, original. Basado en la incapacidad del ojo humano de distinguir negro sobre negro. Los actores se visten con ropa negra y actúan sobre un fondo negro, por lo que el espectador ve sólo lo que los actores desean mostrar: objetos iluminados, personajes flotando...
    Se ha convertido en el espectáculo más popular de Praga y es una experiencia realmente recomendable para todos los visitantes a la ciudad, pues es teatro mudo, por lo que no es necesario hablar checo para entenderlo. Por su peculiaridad despertaría la curiosidad de cualquiera.
  • Otra visita, en este caso, a las tiendas de marionetas centenarias del Callejón del Oro. Una de las tradiciones centenarias de Praga son las tiendas de marionetas hechas a mano. En casi todas las calles principales de la ciudad, podemos encontrar este tipo de negocios en el que se exponen preciosas marionetas artesanas, aunque las que más fama tienen son las que se ubican en el Callejón del Oro.
Callejón del Oro

  •  La gastronomía checa basada principalmente en la carne de cerdo. La Huspenina o queso de cabeza es un plato muy popular el cual podemos encontrar en casi todas las tabernas tradicionales del casco antiguo de la ciudad. Cuando visites Praga, no puedes olvidar probar este plato tan tradicional además de querido por los praguenses.
Huspenina o Queso de cabeza
Finalmente, no os podéis marchar de la ciudad sin subir a la Torre Petrin para admirar unas preciosas vistas de la ciudad. El Monte Petrin es uno de los lugares de esparcimiento más populares en Praga: jardines, viñedos e incluso una gran torre son algunas de las atracciones que encontramos en este punto, al que se puede acceder a pie o tomando un funicular desde la calle Újezd.
La Torre de Petřín; con cierto parecido a la Torre Eiffel; es el mirador más elevado de Praga puesto que se alza a unos 200 metros de altitud sobre el río Moldava.
Torre de Petrin
Espero que hayáis viajado conmigo en este instante aunque solo fuera momentáneamente.
¡¡Es realmente increíble!! ¡Animáos! No os podréis resistir a su encanto.



Publicado por Irene.






                                            

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